miércoles, 12 de diciembre de 2018

LA BUENA OBRA DEL PUEBLO CHICO

La buena obra del pueblo chico

El día lunes a hs 20:30 en la “Casa de las Culturas” de la UNJu se presentó la obra “La buena gente del pueblo chico” del grupo Estación Perico. Con un elenco muy variado pusieron en escena las problemáticas que pueden encontrarse en cualquier pueblo.
De lo simple y lo común hacer lo bello, así denominaría a este trabajo que lleva a las tablas conflictos que son cotidianos para la gente que vive en un pueblo. Como dice el dicho “pueblo chico infierno grande”, así se observan en “La buena gente del pueblo chico” el abuso de poder, la injusticia y cómo, cuando se tiene hambre, se puede hacer cualquier cosa por dinero.
La obra transcurre en una comisaría y los personajes que por ella pasan son: el comisario, el preso, el político, doña Juana, don Martin, la Dalila, la Moncha y el Hortencio; ¿el problema? Quién es el padre del bebé que espera la Dalila.
Al finalizar la obra los actores y las actrices se presentaron y pudieron comentarnos al público que la mayoría están realizando teatro por primera vez. Son vecinos y vecinas de Perico que asistieron a una convocatoria para ser parte de este elenco. Con la ayuda de Sergio Hinojosa (docente de teatro) pudieron poner en las tablas esta obra de Abel Bustos, un dramaturgo de San Pedro (Jujuy). El grupo de vecinos actores también sostiene el teatro “Estación Perico”. Aquí encuentro algo muy importante: hay teatro mas allá de la urbe de San Salvador. En el interior de nuestra provincia también se hace teatro.
“La Buena gente del pueblo chico”, lleva más de un año de haber sido estrenada y ha recorrido otros pueblos del interior. Es una obra dinámica, divertida pero con un gran contenido social que te deja pensando al salir de la sala.
Creo que obras así son necesarias para el teatro en general, muchas veces nos encontramos haciendo obras muy conceptuales, para un público que ya tiene conocimientos sobre el teatro y que pueden resultar aburridas o incomprensibles para alguien que por primera vez asiste al teatro. La necesidad de generar nuevos públicos, que el teatro se convierta en un derecho ganado, para todos y todas, es un trabajo que nos debemos también las/os artistas.

Violeta Fisteus Fuenzalida



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